Cruel venganza: envenenó y mató a sus cuatro hijos porque su esposa lo dejó
David da Silva Lemos, un hombre brasileño de 28 años, asesinó a sus cuatro hijos con una almohada y un cuchillo, esto supuestamente en venganza contra su ex esposa después de que ella lo dejara. Cabe señalar, que los cuerpos de los niños, de tres, seis, ocho y 11 años fueron localizados el pasado martes 13 de diciembre en la vivienda del sospechoso, en Alvorada, en el sur de Brasil.
De acuerdo con la policía, el arrestó de David, se dio en un hotel en la vecina ciudad de Porto Alegre el pasado 14 de diciembre.
El supuesto asesino señaló a los efectivos de seguridad, a cada uno de sus hijos les dio un "té", para calmarlos y luego poder asfixiarlos con una almohada y finalmente apuñalarlos hasta la muerte.
Localizan sin vida a los niños
De acuerdo con la información divulgada por las autoridades, los niños fueron encontrados muertos en la casa de David con heridas de arma blanca alrededor de las 19:30 horas del martes, cuando los familiares llamaron a la policía luego de no saber nada de ellos.
Un día después, el parricida fue localizado, detenido y llevado a la comisaría, donde ejerció su derecho a guardar silencio.
Según lo mencionado por Idenise Martins da Silva, la abuela materna de las víctimas cree que mató a los niños para "vengarse" de su madre, de quien se había separado hace apenas unos meses.
Idenise dijo a los medios locales que David ya había atacado a mi hija y que su relación había terminado para siempre tras varias agresiones. Hasta el día del multihomicidio, existía una orden de restricción en su contra por violencia doméstica.
La policía señaló que la pareja había estado junta en los últimos 12 años, sin embargo esta se separó después de que Lemos agrediera a su pareja en septiembre.
En repetidas ocasiones, la víctima de 24 años había denunciado el incidente a la policía. Cabe señalar que las víctimas se llamaban Kimberlly, Giovanna, Donavan y Yasmin Antunes Lemos.
En otro caso en agosto, una mujer brasileña fue arrestada bajo sospecha de asesinato, después de que se encontraran los cuerpos en descomposición de sus hijos pequeños bajo su cama.
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