Nicolás Gutiérrez: Un Candidato que usa de la violencia como arma electoral
En medio de la agitación política y las tensiones electorales en Chiautempan, Nicolás Gutiérrez, aspirante a la presidencia municipal, ha generado controversia y burla con sus declaraciones recientes.
Aunque se presenta como víctima de la “guerra sucia”, sus palabras sugieren una estrategia más oscura.
Gutiérrez, exsecretario del ayuntamiento durante la administración del dilapidador y corrupto Héctor Domínguez, ha insinuado que la violencia podría estallar durante las elecciones del 2 de junio.
¿Por qué? Las tendencias no le favorecen, ya no le cuadran sus números en las encuestas a modo y parece estar dispuesto a cualquier medida para cambiar el rumbo de la contienda.
Con un semblante de pesadumbre y aflicción sobreactuados, Gutiérrez ha advertido que ha estado tratando de calmar a los ánimos exaltados, pero no garantiza que no haya enfrentamientos, pero no dice que él es la mano que mece la cuna.
¿Es esta una amenaza velada? Su historial sugiere que no es ajeno a prácticas cuestionables para lograr sus objetivos.
Para los partidos PAN y PRI, que también compiten en esta contienda, es hora de poner en orden a su candidato violento.
La transparencia, la seguridad y la calidad de vida en Chiautempan están en juego.
La ciudadanía merece una elección libre de violencia y manipulación.
La pregunta que queda en el aire es si Gutiérrez está dispuesto a cruzar límites éticos para alcanzar la alcaldía.
Las señoras del PAN y PRI deben tomar nota y asegurarse de que su candidato no manche su imagen en el proceso.
La integridad y la responsabilidad deben prevalecer sobre la desesperación y la agresión.
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