Escuela de Zacatecas transforma la vida de estudiantes que tienen discapacidad

Escuela de Zacatecas transforma la vida de estudiantes que tienen discapacidad

Sentada en posición de flor de loto encima de un pupitre escolar, Regina saca billetes y monedas de un sobre blanco que está sobre la paleta de su silla y empieza a contar dinero.

“100, 150, 200, 220 y –finalmente- 240”, expresa con felicidad esta adolescente de 15 años, a quien el Síndrome de Down no le ha representado un obstáculo para que curse el primer grado de secundaria.

Esa cantidad le fue entregada como resultado de un cuadro al óleo que vendió al elaborarlo en la clase de Dibujo y pintura que recibe en el Centro de Atención Múltiple (CAM) Laboral “Lev Semiónovich Vygotsky”.

Regina aprendió que, a través de un oficio en el arte de la Pintura, puede ganar un dinero.

Este centro escolar ubicado en Guadalupe, mismo que es punto de referencia a nivel nacional en la atención de alumnos con discapacidad intelectual, tiene como filosofía institucional desarrollar habilidades en los estudiantes que les permitan incorporarse al mercado laboral.

Al día de hoy, atiende a 98 alumnos, de 12 a 18 años, que tienen discapacidades intelectual, motriz o múltiple: sordera, Síndrome de Down; y autismo. Ellos estudian el nivel secundaria y, de acuerdo con su edad, aprenden Formación para la vida y el trabajo.

Un trapeador no puede faltar en casa

En Zacatecas se conserva en pie y en uso una máquina manual-mecánica que es forjadora de escobas y trapeadores. A principios de los 80 del siglo anterior llegó de Filipinas; hay pocas como ésta.

Se encuentra en un aula taller de este CAM laboral y es operada por el instructor Antonio Cuellar, un hombre que tiene 60 años de edad y es ciego. Está en la institución desde hace 30 años.

A partir del sonido y del tacto de la máquina, ha desarrollado la capacidad de hacer un trapeador en un tiempo récord de 1 minuto y 20 segundos.

Él y Víctor Trujillo, otro instructor que también es ciego, son quienes se encargan de formar a los alumnos de esta institución en la elaboración de trapeadores.

Actualmente hay 22 alumnos que aprenden cómo hacer uno de estos artículos a partir de un palo largo, alambre y con el tipo de material de limpieza.

De acuerdo con las habilidades y capacidades de cada alumno, pero en uno o dos años, pueden elaborar trapeadores de microfibra, pabilo, hilo grueso, hilo delgado o felpa.

Antonio Cuéllar refiere que este oficio bien aprendido da la posibilidad a los alumnos de tener un ingreso seguro, “es que un trapeador nunca puede faltar en una casa”.

El taller de trapeadores es uno de cuatro oficios que se enseñan en el CAM laboral “Lev Semiónovich Vygotsky”, en el que también se enseña la preparación de alimentos y bebidas, carpintería y costura.

A base de paciencia y entendiendo sus necesidades educativas, cada alumno va desarrollado la habilidad de zurcir ropa, tallar la madera o preparar un platillo.

“Cada alumno es como una fruta que debe esperar un tiempo para llegar a su madurez, y cuando eso ocurre está en condiciones de desarrollar su vida como cualquier persona”, comenta Brenda Rivera Núñez, subdirectora de esta institución.

Juanito estudia y es guardia de seguridad

Vestido con la playera de visitante del Real Madrid, Juanito está atento, en primera fila, en la clase de matemáticas. Desde que regresó a clases presenciales le ha puesto más entusiasmo a su aprendizaje, pues sabe que está por terminar la secundaria.

Tiene discapacidad intelectual. A diferencia de otros alumnos que viven en una familia, él tiene su morada en la Casa Hogar “Plácido Domingo” administrada por el Sistema Estatal de Desarrollo Integral para la Familia (SEDIF)

Desde pequeño vive en este lugar, recién cumplió 18 años. No tiene familia, su papá murió de cáncer.

La formación educativa que ha recibido en esta institución le permite hoy en día tener un trabajo. Por las tardes y fines de semana, se desempeña como guardia de seguridad en el estacionamiento público de la Plaza Bicentenario, en la capital de Zacatecas.

Con el salario que recibe se compra ropa, zapatos, artículos de higiene personal y hasta algunas cosas para hacer más llevadera la estancia en su habitación.

Juanito es uno de 26 alumnos de este CAM laboral que tienen un empleo actual. Los demás desempeñan funciones de jardinería, mantenimiento, limpieza, ayudante de cocina, lavaplatos y mucamas.

Las instituciones empleadoras de estudiantes del CAM son la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), la Comisión de Derechos Humanos del Estado (CDHE), el Consejo Zacatecano de Ciencia y Tecnología (Cozcyt) y el hotel Fiesta Inn.

Mejorar su calidad de vida

Con una inversión superior al millón de pesos, el jueves 5 de mayo el Gobernador David Monreal Ávila anunció la rehabilitación de servicios sanitarios, sustitución de tubería hidráulica y reparación del patio del Centro de Atención Múltiple (CAM) Laboral “Lev Semiónovich Vygotsky”.

Entregó aparatos funcionales, así como equipo de cómputo, didáctico y herramientas para los talleres de cocina y carpintería, y anunció financiamiento para pequeños negocios del alumnado.

Ofreció que, en lo inmediato, se activará una serie de préstamos de 10, 20 y 30 mil pesos, con el fin de contribuir a crear oportunidades laborales y de acceso para los estudiantes, a fin de que puedan tener una mejor calidad de vida.

El aprendizaje es como una torre

No es casual que esta escuela lleve el nombre del considerado “Mozart de la Psicología”, pues desde hace 38 años, la institución refrenda una y otra vez, en su atención escolar, una máxima deLev Semiónovich Vygotsky: “El aprendizaje es como una torre, hay que ir construyéndolo paso a paso”.

 

 

Comentarios